Cómo diseñar una estrategia de innovación con impacto real al #ABordoStyle (en 5 pasos)

En los últimos años, la palabra “innovación” se ha convertido en un comodín.

Se le exige a las empresas que innoven, se forman equipos de innovación, se crean departamentos, se repiten metodologías. Y, sin embargo, muchas veces… nada cambia.

¿Por qué?
Porque innovar no es hacer talleres con post-its.
Ni acumular ideas en una pizarra.
Ni llenarse de términos de moda sin una brújula clara.

Innovar es diseñar un camino con propósito, metodología y compromiso real con el impacto.

En A Bordo llevamos años acompañando a equipos, instituciones y organizaciones que quieren dejar de hacer más de lo mismo y empezar a transformar, de verdad.

Y lo hacemos desde un lugar diferente: la mar, ese territorio fértil para pensar, crear y tomar perspectiva.

Gracias a nuestra metodología propia —el #BlendedLearningABordo— combinamos conocimiento técnico, dinámicas estratégicas y experiencias transformadoras en un entorno donde el cambio no solo se planifica: se vive.

A continuación, te compartimos cómo se diseña una estrategia de innovación con impacto real, en solo cinco pasos que pueden transformar el rumbo de tu empresa.

Paso 1: Design Research — Ir a la raíz del problema real

Toda innovación que no parte de una comprensión profunda del contexto corre el riesgo de ser un parche más.

Por eso, el primer paso es hacer design research. Esto implica investigar con rigor y empatía:

• Escuchar a los usuarios reales (no solo a los clientes ideales que imaginamos)
• Analizar datos internos y externos
• Observar comportamientos, detectar patrones, entender motivaciones
• Y lo más importante: reencuadrar el reto.

Porque a menudo el verdadero problema no es el que nos dijeron al inicio, sino uno más profundo, más sistémico… y más interesante de resolver.

En A Bordo, esta fase se desarrolla tanto en tierra como en la mar: entrevistas, inmersiones con el equipo, exploración colectiva y uso de herramientas visuales nos permiten mapear el territorio antes de definir el rumbo.

Paso 2: Cocreación — Activar la inteligencia colectiva

Una vez detectado el verdadero reto, llega el momento de abrir el proceso a quienes tienen algo que decir: tu equipo, tus aliados, tus usuarios.

La cocreación no es una moda, es una necesidad.
Hoy más que nunca, los desafíos son tan complejos que ninguna persona, por brillante que sea, puede resolverlos sola.

Facilita sesiones dinámicas donde se generen ideas que nacen del cruce de perspectivas, vivencias y saberes diversos.
Así se activa la creatividad colectiva y se construyen soluciones que conectan con el propósito organizacional.

Nosotros ¿Lo hacemos con velas? También.

Porque cocrear navegando en un velero genera una energía distinta: menos defensas, más escucha, más humanidad.

La mar ayuda a soltar lo que no sirve y a imaginar lo que aún no existe.

Paso 3: Prototipo rápido — Testear antes de enamorarse

En innovación, hay una máxima que repetimos como un mantra:
«Testea antes de enamorarte de tu idea.»

Una estrategia efectiva no espera a tener un producto final para salir al mundo.
Construye un prototipo rápido, con lo mínimo necesario para ponerlo delante de usuarios reales y obtener feedback útil.

¿Qué buscamos con esto?

• Reducir el riesgo de lanzar algo que no funcione
• Aprender antes de invertir grandes recursos
• Corregir el rumbo con agilidad

El prototipo puede ser una maqueta, una simulación, una experiencia piloto…

Lo importante no es la forma, sino lo que nos permite aprender.

En A Bordo, muchos prototipos se testean directamente en la mar: workshops, dinámicas, apps, servicios o interacciones se experimentan en un entorno real, no en un power point.

Paso 4: Análisis de resultados — Medir el triple impacto

Una estrategia sin métricas claras es solo una apuesta ciega.

Por eso, una vez testeado el prototipo, debes analizar resultados con una mirada amplia y profunda.

No se trata solo de saber si funcionó, sino cómo funcionó, para quién, y con qué consecuencias.

En A Bordo medimos KPIs específicos y, sobre todo, el triple impacto:

• Económico: ¿genera valor? ¿es viable? ¿mejora resultados?
• Social: ¿contribuye al bienestar del equipo o de la comunidad?
• Ambiental: ¿es coherente con los principios de sostenibilidad?

Porque innovar no puede ser a costa de lo que nos rodea. Y mucho menos del planeta.

Esta fase nos permite definir con claridad cuál será el Mínimo Producto Viable (MVP):

Ese primer resultado que ya ofrece valor, que está listo para lanzarse al mercado o a la organización y que será la base sobre la que escalar.

Paso 5: Validación en entorno real — Refinar para escalar

Con el MVP listo, llega el momento de validarlo en un entorno real.

Esto no es una prueba de laboratorio.

Aquí lo tienes que poner a funcionar con personas reales, en contextos reales, con sus fricciones, sus tiempos y sus matices.

Recoge feedback honesto, ajusta lo que no funciona, potencia lo que sí.

Y lo más importante: documenta todo para que el aprendizaje se integre, se comparta y se convierta en capacidad instalada en la organización.

Una vez refinado, ya estamos listos para escalar.

Pero no desde la prisa, sino desde la solidez. Desde lo aprendido.

Desde lo que ya ha sido validado con propósito y con rigor.

¿Y por qué en A Bordo lo hacemos navegando en un velero?

Porque la mar nos conecta con lo esencial.

Nos recuerda que el control es una ilusión, que el movimiento es constante y que, para navegar, hace falta equipo, adaptación y rumbo claro.

La mar es el espacio ideal para pensar diferente, crear sin distracciones y conectar con una versión más auténtica de nosotros mismos y de nuestros equipos.

En A Bordo no solo enseñamos a innovar.

Creamos experiencias que transforman la forma en la que las organizaciones piensan, se relacionan y actúan.

Nuestra metodología #BlendedLearningABordo se adapta a cada organización, pero siempre combina:

• Aprendizaje técnico y estratégico
• Dinámicas de equipo
• Inmersión en la naturaleza
• Y, por supuesto, navegación a vela

Todo esto genera un entorno de aprendizaje único, que favorece la reflexión, la creatividad, la cohesión y la acción.

¿Y ahora qué?

Si estás liderando un reto de innovación, quieres transformar tu organización o simplemente buscas una forma distinta de hacer las cosas… podemos ayudarte.

Escríbenos o deja un comentario con la palabra INNOVA y te invitamos a una sesión de diagnóstico gratuita para explorar cómo podemos navegar juntos hacia tu próximo horizonte.